5 de septiembre de 2008

El fondo político y social del conflicto que exploto en Córdoba semanas atrás

Lucas Koussikian
Colaborador de Senda Política y Social

Hace unas semanas atrás en la provincia de Córdoba parecía estallar una verdadera “guerra civil” que nos hacia acordar a un Cordobazo, aunque bajo circunstancias y motivos totalmente distintos. Fueron 72 horas en las que los cordobeses vivimos en peligro por efecto de divergencias políticas que, desde luego, nunca debieron llegar tan lejos.

Cabía preguntarse la razón o los motivos que hicieron que se den estos semejantes hechos de violencia y manifestación, para lo cual es necesario tener en cuenta algunos aspectos claves para poder comprender de manera satisfactoria el conflicto y sus motivos.
El gobierno provincial necesitaba semanas atrás aprobar sin falta un “paquete” de leyes de reforma previsional y tributaria por un faltante de caja, mientras espera que la Nación aporte unos 1.100 millones de pesos, trabados por la Casa Rosada luego de que el gobernador Juan Schiaretti y sus legisladores nacionales se pusieran de lado del campo en el conflicto por las retenciones móviles.

Las leyes que fueron sancionadas por la Legislatura de la provincia le permitirá al gobierno provincial recaudar 200 millones de pesos al subir la alícuota de Ingresos Brutos, y otros 200 millones recortando haberes jubilatorios que van de 5.000 a 22.840 pesos.

Aspectos Políticos - Compensaciones. Hay que recordar que la provincia es una de las siete que no transfirió su Caja de Jubilaciones a la Nación durante la gestión de Carlos Menem, lo que devino en un complicado sistema de compensaciones por parte de la Nación que fueron firmados durante la gestión del ex gobernador José Manuel de la Sota.
Mientras en el año 2000 había en Córdoba menos de 70 mil jubilados, en la actualidad casi llegan a 90.000, habiéndose retirado entre el 2003 y el 2006 más de 12 mil empleados, muchos de ellos de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba, con jubilaciones superiores a los 5.000 pesos.

También utilizó el ex gobernador la Caja para otorgar importantes aumentos salariales, lo que provocó las críticas del gobierno nacional, que sintió que debía subsidiar estos aumentos con sus arcas, en especial el último realizado por De la Sota meses antes de dejar el gobierno, reestableciendo el 82 por ciento móvil a todos los jubilados.

Esta situación motivó que ya antes de finalizar su mandato De la Sota, la Nación dejara de enviar los fondos a Córdoba, profundizando el déficit de la Caja que a esta altura ya es insostenible: 1.500 millones según la provincia, y nada de acuerdo a las declaraciones realizadas por el ministro del Interior, Florencio Randazzo.

A mi entender el polémico paquete, causó el caos en el centro de la ciudad provocando violentas protestas de manifestantes de varios gremios, también contempla reformas de fondo que había pedido el gobierno nacional mucho antes de que Schiaretti decidiera ponerse del lado del agro y defender los intereses del complejo agroalimentario provincial. Es claro que el gobierno nacional tiene un visión muy fina o muy escasa del termino federalismo, ya que esta poniendo en la misma balanza a un conflicto nacional con uno a nivel provincial.

Claramente sin un minucioso y profundo análisis político podemos observar que el gobierno de Cristina Kirchner no termina de deglutir que haya sido Córdoba una de las provincias que más lidió para evitar la sanción de las retenciones móviles en el Congreso.
Lo cierto es que luego de violentos incidentes entre la policía y manifestantes contra las bajas en las jubilaciones, el proyecto fue convertido en ley gracias a los votos del bloque Unión por Córdoba. Las quitas serán de entre el 22 y 27% en las jubilaciones superiores a los $ 5.000.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Muy bueno chicos, métanle para adelante nomás! En el mundo de la política y las relaciones internacionales hace falta gente copada que entienda lo que está comunicando.
Saludos, Jon.